martes, 15 de octubre de 2013

Desaparecer y no volver

Desolación. Esa es la palabra correcta. Siempre la misma pregunta, el mismo sentimiento de que algo no va bien. ¿Alguna vez dejará de rondarme ese sentimiento? Noto como mi pecho está siendo apretado por una fuerza invisible que me nubla los sentimientos. Es algo así como la soledad acompañada, el deseo de una botella de tequila que te quita la conciencia y los pensamientos.
Me duele el corazón, si es que el corazón pueda doler. Pero es eso precisamente. El dolor del corazón, el presentimiento de algo que no marcha bien. ¿Qué es? Ya no sé que hacer con esa cosa que me deja sin fuerzas, sin sueño, sin descanso, sin ganas de vivir. Pero no queda otra, ¿no?. Hay que seguir adelante con lo que sea, con quién sea. Y todo lo demás queda en lo importante, y esta cosa olvidada. Pero me dan ganas de morirme, de dejarlo todo, de llorar hasta que no quede líquido dentro de mi. 
Es la inconstante manera de mi ser, de sentirse feliz un día y jodido semanas. ¿Es depresión?¿Es locura?¿Es egoísmo?¿Es envidia?¿Qué es?