DEJA QUE SE EXCITEN TUS OÍDOS III

La sonrisa descarada, las gafas de sol oscuras en los ojos, la ropa mal puesta y descuidada...Aquel chico era uno más que se sentaba en una mesa de una cafetería cualquiera...Yo lo observaba desde otra mesa...Mis sobrinos revoleteaban alrededor mía, sus risas me parecían lejanas y apagadas, como si tuviera los oídos embotados...Mi hermana mayor se comía unos pistachos verdes, cosa que me recordó que tenía que llamar a mi amiga y no sabía porqué...El chico estaba ligeramente escurrido en la silla, con una cerveza Heineken que levantaba de vez en cuando y le daba un sorbo, el vaso de tubo que el camarero le había llevado seguía limpio...La botella de cristal de la cerveza desprendía un suave color verde en su piel pálida a causa del juego de la luz...El humo del cigarrillo se enroscaba hacia arriba, de vez en cuando el chico lo agitaba nerviosamente para quitar la ceniza...En ese momento me pregunté porque mi hermana nos había llevado a una cafetería dónde estaba permitido fumar con mis sobrinos, ella que es una superprotectora...

En la televisión el canal de la MTV, mostraba una descarada Beyoncé bailando con Lady Gaga al ritmo de la música...”Videophone”...La gente de la cafetería no le prestaba atención, a no ser alguna miradita escondida de algún hombre reprendida por su pareja, entre ellos el marido de mi hermana...Pero el chico de aquella mesa miraba para la ventana, su cigarrillo estaba practicamente consumido a no ser que pensara fumarse hasta la boquilla...

Parecía una persona muy reservada, y me recordó a alguién, pero no sabía a quién...

Sus pantalones vaqueros, rotos en diversos lugares, le daban una apariencia de gamberro...Cuando se inclinó para apagar el cigarrillo pude vislumbra los calzoncillos azul pálido, los identifiqué como los míticos bóxer de Unno...

La camisa de cuadros tan de moda últimamente estaba un poco arrugada y la camiseta que llevaba debajo era verde...Volví a acordarme de mi amiga, el verde es su color favorito...Entonces el chico se levantó...Andaba de esa forma tambaleante, con las manos en los bolsillos y ligeramente encorvado...

Cuando pasó por mi lado me dí cuenta que seguramente llevaba encima varias noches sin dormir, tenía la piel pálida, arrastraba demasiado los pies y olia a esa mezla de humo y humanidad tan típica de los pub...En aquel momento pensé que realmente podría acabar con un chico como aquel y convertirme en una especie de Camomilla italiana encima de una moto...Es decir, aquello de lo que he estado huyendo toda mi vida...La típica chica que busca solo momentos fugaces en los que hundirse y disfrutar hasta que el cuerpo aguante, donde te pierdes y lo único que deseas es Sexo, Drogas y Rock&Roll...