Ow Ow Ow

Cuando Marzo mayea, Mayo marcea.

Que absurdo es todo. Tras una semana de sol y cierta tranquilidad atmosférica, de nuevo nos vemos sumidos en la climatología ancestral y tradicional de Santiago de Compostela. Como la canción de Luar na Lubre..."Chove en Santiago"...Pero, a pesar de este tiempo infernal de lluvia, nubes y viento, yo estoy contenta, me gusta...se refleja mi interior volcado como un vaso de agua en el cielo de esta mi ciudad adoptiva.

¿El por qué?

Es sencillo, a penar ocho horas escasas para dormir, sueño atrasado, mil cosas que hacer en dos días, 13 páginas que estudiar en dos horas, una vida por vivir...

Estoy segura de que mañana 23:30 voy a estar andando como un pato mareado por los rompe-tobillos de los adoquines húmedos. Estaré deseando dejarme las rodillas peladas, los pies dolorosos y los labios hinchados...quiero bailar, beber y ronronear junto a la Luna oculta tras las nubes.

Quiero sentir que la sangre hierve en mis venas, quiero notar la vida fluyendo por mi piel y echar la culpa, la soledad y la desesperación en un contenedor de orgánicos.

"Queres, queres, queres...e non podes Catuxa".